miércoles, 4 de abril de 2012

29 de Marzo

Después de unos días, en los que he estado analizando los hechos, me dispongo a relatar lo vivido en la pasada huelga general del 29 de marzo.

La mañana comenzó tranquila en Terrassa. Pude ver a los piquetes pasando por los locales abiertos al ritmo de las Sardanas, estudiantes parando tímidamente el tráfico o gente curiosa alrededor del ajuntamiento.
Ante la imposibilidad de bajar a Barcelona hasta las 17 h, debido a la huelga de los compañeros del transporte público, decidí retirarme a casa para comer y preparar la cámara.

17h : Vicky y yo ya estamos en el ferrocarril, una marea de gente llena por completo los vagones en Terrassa. De camino a Barcelona 17 paradas por delante, en cada una de ellas mareas de gente intentando subir a un tren ya de por si totalmente colapsado. La imagen, aunque agobiante, no deja de ser hermosa. Cientos de personas intentando llegar a Barcelona para reclamar sus derechos.
A las 17.30 llegamos a Barcelona, paramos en la estación de Provença para dar así mejor con nuestros compañeros de la C.T.T.
El Paseo de Gracia se encuentra abarrotado. Niños, padres, mayores, sindicatos, anarkistas...todos unidos esperando a que la marcha comience.
Lentamente, y ya al lado de los compañeros de la C.T.T. la marea de gente comienza a bajar camino de Pl Catalunya, lugar central de la manifestación, donde otros muchos ( amigos incluidos ) esperaban al resto.
A la altura de Gran Vía, gases lacrimógenos llaman nuestra atención. Gracias a los compañeros instalados en Pl Catalunya, nos llegan noticias de un grupo de personas ( secretas incluidos ) que han provocado disturbios y un fuego en el exterior de el Corte Inglés.

Sacamos los pañuelos/palestinas/pasamontañas. El humo cubre todo el tramo entre Pl Catalunya y la Gran Vía.
Entre todo ese humo, podemos distinguir al cuerpo de Bomberos, que toma la cabecera y avanza. Los gases son cada vez más intensos, la respiración y visibilidad se hacen difíciles.
El grueso de la manifestación se desvía por Gran Vía. Nosotros nos quedamos.
Los Mossos continúan disparando gas, la gente corre buscando una salida. Tenemos que retroceder de nuevo hacia la fuente de Gran Vía, donde muchas personas aprovechan para poder respirar y echarse agua en sus irritados ojos.
Los Mossos avanzan. Comienzan los disparos.
Gente despavorida corre huyendo de los disparos mientras les fotografío y busco a mis compañeros. Hemos montado barricadas, que algunos queman y otros cogen aire para prepararse para lo que iba a venir.
Retrocedemos de nuevo.Intentamos llegar al cruce con Diputació, pero los Mossos cortan la calle y vuelven a disparar.
Creo recordar que las balas de goma estaba prohibido disparar directamente, que se debía disparar hacia el suelo. Pude comprobar que eso no era así. Estaban disparando al cuerpo.
Volvemos a retroceder.
Montan barricadas en los cuatro costados, hay mucha gente atrapada. Yo intento llegar donde se hayan dos compañeros, pero es inútil, a cada paso que avanzo retrocedo tres. La situación empeora.

De pronto, un momento de tregua, los Mossos reculan y dejan que nos reagrupemos. Consigo dar con mis compañeros, estamos en Diputació. Sale algún valiente pidiendo unidad a gritos, otros lo que intentan es salir, el resto se mantiene en pie. No tenemos miedo. No vamos a irnos, no tenemos donde ir.
El humo cubre Barcelona.
Las idas y venidas de las furgonas policiales generan más carreras. Unos disparando, los otros reclamando su lugar en un mundo globalizado.
Los helicópteros dan nuestra posición a los Mossos, que escampan a sus anchas por las calles, cargando, disparando, deteniendo.
Llega el momento de salir. Nos dirigimos a Pl Universidad, donde un gran grupo de gente se refugia entre sí ( yo calculo más de tres mil personas ). Entonces vemos desde lejos como cinco furgonetas irrumpen por la calle Balmes disparando. Toda la gente corre, ya no sabemos ni para donde.
Las balas silban a mi lado. Estamos sitiados por momentos en c/Consell de Cent rodeados de barricadas por los cuatro costados y Mossos.
El grupo se disuelve. Tres compañeros y yo conseguimos salir momentáneamente. Hay algún local abierto, donde gente despreocupada saborea una cerveza mientras observa como otros luchan por sus derechos.El helicóptero sigue sobre nuestras cabezas.
Conseguimos llegar a la c/ Tallers, entonces tres furgonas pasan a nuestro lado pasando por encima de los containers. Por dentro pienso que es el fin. Pero no es así.
Después de una hora, conseguimos salir de la zona roja. Los compañeros que dejamos atrás, aun intentan llegar a Arco del Triunfo ( irónico, no? ). Son las 22h.
Todos estamos bien. Nadie resultó herido ( de los nuestros ). La lucha continua.
Barcelona duerme en humo.



Qué vi el 29 M ?
Vi lucha, valentía, compañerismo.
Actos vandálicos?
Si, si a eso se le llama quemar unos containers para impedir una masacre. Si que lo vi. Vi policías disparar sin mirar, vi gente atrapada, vi que lo más importante para nuestros políticos es silenciarnos, vi que lo más importante para los medios fueron las protestas violentas.Vi que duele más un Starbucks quemado, que 4.785.000 personas desempleadas. Vi que es más importante abrir por todos los medios un Corte Inglés, custodiado por nuestras fuerzas de seguridad ( Mossos ) , que el derecho/respeto, por una huelga general.
Vi cerca de 300.000 personas, pequeñas y grandes, reclamando sus derechos.

Nacimos libres,
nos criamos en sociedad justa,
luchamos contra la injusticia,
morimos libres.

1 comentario:

Palomitas de Maiz dijo...

Me encanta como narras los hechos, la verdad es que se hace ameno leerte, cada vez me gusta mas, es como si uno huviera estado allí.