jueves, 2 de abril de 2020

Diarios de una cuarentena (8)



Mi queridísima pandemia:

He recuperado un poco el humor.
Creo que salir al patio a las 21.00h y no escuchar una multitud de cacerolas pidiendo un golpe de estado, a tenido algo que ver.
El mundo se ha vuelto loco, aunque también más limpio.

En los Estados Unidos, la venta de armas se a "disparado" ante la llegada de Covid ( digna frase para Matías Prats ).
Siguiendo en los States, la llegada de la pandemia también ha dejado millones de desempleados. Y en un país sin sanidad publica, quedarte sin trabajo significa perder la cobertura sanitaria.
Curioso verdad? No tengo sanidad, pero me compro un pistola.
Otra medida "singular" ha sido tomada en Las Vegas, donde a los sin techo les han pintado en la calle a modo de parking público unas cuadrículas donde poder dormir!

En Malasia, dentro del pack de medidas, el gobierno aconseja a las mujeres que sean sumisas y flexibles con sus esposos.
En Filipinas, su presidente ordena disparar a matar a todo aquel que se salte el confinamiento.
En la India marcan las casas de los afectados como antiguamente se hacía con la peste en Europa. Parece ser que cuesta menos dinero que la sanidad pública o los 116 millones de Dólares en armamento recién comprado a Israel.
"Por qué todo el mundo compra armas? Acaso se puede disparar al Covid_19?"
Aunque el mejor a sido el Rey de Tailandia, marchándose a un resort en el sur de Alemania con sus 20 concubinas y  todos sus sirvientes. Un puto crack!

Aquí en "Spain", el cachondeo no cesa.
Desde denuncias de un grupo denominado Abogados Cristianos al gobierno por negligencia, pasamos a la petición de partidos políticos de ultraderecha de un golpe de estado. Así, como si nada.
Y mi favorita, distinguir a enfermos de autismo o semejantes, con un brazalete azul cuando salgan a la calle. Es genial verdad? Recuerda a la Europa Nazi.

Lo único que se mantiene unido ahora mismo en el mundo, son los bancos. Afilando sus garras y relamiéndose con la tajada que van a sacar de esto, justo ahora que les había estallado la crisis económica en las narices, por volver a jugar y especular.
El Covid les ha venido de perlas. No solo no darán explicaciones a la crisis, dado que con la pandemia la pueden cubrir "bien", sino que encima pasan a ser los salvadores de la economía mundial.
Propongo una cacerolada después del vermut en su honor.

Si todo esto no lo ves con humor...


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