domingo, 22 de marzo de 2020

Diarios de una cuarentena (3)


Acabo de salir a tirar la basura.
Después de llevar prácticamente 3h bailando y cantando por el salón, tirar la basura, salir a la calle y ver que...se parece a cualquier domingo!
No hay ni cristo. Salvo alguna abuela, perros que sacan a sus dueños, un silencio sepulcral y el paki abierto.
Era tan normal, que estaba haciendo lo normal un domingo al medio día. Tirar el vidrio acumulado del fin de semana y pagar la cerveza con céntimos.

Esta mañana, el gobierno ha anunciado la ampliación del estado de alarma dos semanas más.
Esto significa, que el Covid_19, nos ha quitado los toros, el fútbol y la semana santa. Comienza a caerme bien.
Paso el día con unos pantalones que no es que estén rotos, mejor; la tela está tan desgastada que trasparentan. Imagino que al darme el sol, esas partes cojan color ( broma tonta ).

Una de las cosas que me pasan con la música, es que adivinan tu estado de ánimo.
En esta crisis, no paro de escuchar temazos, uno detrás de otro, de aquellos que te hacen bailar.
Y pienso:
 - Bailo en plena pandemia, con una sonrisa, cantando como si no hubiera un mañana.
Se podría considerar demencia? psicopatía?

Acabo de escuchar a mi vecina hablar por teléfono.
La otra persona era Venezolana. Mi vecina, preocupada  por ello, dado que Venezuela carece de recursos, le recomendaba a su amiga el seguro sanitario privado. Con dos cojonazos. Eso y que es una de las vecinas que cacerola en mano agradece a la pública cada día a las 20h. Claro que sí, guapi!
Nota informativa:
Venezuela, en colaboración con Cuba y China, han conseguido más avances que el resto.
Nuestros gobiernos, aquellos que han demonizado estos países, prefieren barrer para casa o como diría un Neoliberalista:
"Tonto el último, quien encuentre la vacuna, se quedará la patente".

Un mundo unido por una causa.
La estupidez.

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