La primera vez que me fui de Cerdanyola fue la que más me ha costado.
En ese momento estaba asentado,
con grandes amigos y una gran sensación de alegría.
Pero salió una oferta irrechazable y tuve que partir.
La última tarde,
cuando metía las últimas cosas en la furgo,
veía la cara de Yeyu
y sentías que allí se quedaría siempre una parte de ti.
Una última mirada,
un último abrazo,
un continuará...
un hacia adelante.
No todo el mundo tiene el valor de lanzarse a por las cosas
y tampoco se puede ser de todo el mundo...jejejejeeee
pero dejando pedazitos de lo que has sido en cada sitio,
y llevándote pedazitos de todos esos sitios donde has estado,
son los que hacen que la vida tenga algo de sentido,
la que te enseña como es,
la te te enseña como eres y como serás.
Dedicado a esa gente que conicí en esa época en Cerdanyola del Vallès
y a Imré , por que ha sido un placer formar parte de esos momentos otra vez.